Oh, guardianes sagrados de los caminos del mundo,
a ustedes me dirijo en busca de protección y sabiduría.
Este (Aire): Que el viento despeje mi mente y me traiga claridad.
Sur (Fuego): Que la llama de la vida me dé fuerza y propósito.
Oeste (Agua): Que las aguas de la intuición me guíen con fluidez.
Norte (Tierra): Que la solidez del suelo me brinde estabilidad y firmeza.
Que en cada dirección haya luz,
que en cada paso haya propósito,
y que mi espíritu siempre encuentre el camino.
Así es, así será.